- “Durante el período neoliberal, de 1983 hasta que llegamos nosotros, hasta el 2018, 36 años, todas las reformas a la Constitución del 17 vigente, todas fueron para favorecer a una minoría rapaz, no encuentras una reforma que se haya hecho en 36 años, para favorecer al pueblo…”: AMLO
Nora VILLEGAS*
Ciudad de México.- Recordando que nunca antes había dado una entrevista, el presidente Andrés Manuel López Obrador y la periodista rusa Inna Afinogenova, compartían cordiales sonrisas, mientras se dirigían al salón del Palacio Nacional, en donde el pasado martes 20 de febrero de 2024, por primera vez en su sexenio, el mandatario habló en el acostumbrado formato concedido por anteriores presidentes: ellos a periodistas clásicos mexicanos y de reconocido renombre, en diferentes momentos de su administración.
Las conversaciones han sido muy diferentes. Enrique Peña Nieto, por ejemplo, en 2018 charló con Denise Maerker a 102 días de que dejara la presidencia. Las preguntas versaron en torno a los aciertos y los errores que cometió durante su mandato, los temas álgidos como los estudiantes de Ayotzinapa, la reforma educativa, entre otros. Y aunque fue evidentemente actuada, procuraron colocar en el guión algunos momentos incómodos, preguntas agudas como la de la liberación de Elba Esther Gordillo, el fracaso de la estrategia de seguridad implementada, la defensa de la construcción del aeropuerto de Texcoco, etcétera.
En aquella ocasión, el saliente presidente Peña pidió perdón al pueblo de México por los errores, por las malas decisiones, por los desaciertos. Sincero o no, pidió perdón y al igual que Andrés Manuel, aseguró tajantemente que se retirará de la vida política y pública del país.
Por su parte, Felipe Calderón Hinojosa concedió entrevistas a Adriana Pérez Cañedo para Canal 11, a Jorge Ramos, a Adela Micha, entre otros, en las cuales cita datos y realiza análisis cuantitativos -y no cualitativos- de las acciones de su gobierno; sin embargo, los entrevistadores insisten en que los esfuerzos de su gestión no habían sido suficientes y, aunque son cautelosos para preguntar directamente sobre la guerra fallida y cruenta contra el narcotráfico, en esas charlas, FeCal achaca a las circunstancias económicas que el país vivía antes de su mandato, el sufrimiento que todos los mexicanos reprochamos durante su sexenio.
Al principio de su mandato, Vicente Fox Quezada participó en una muy previamente acordada entrevista con formato de mesa redonda, muy al estilo de Joaquín López Dóriga, en la que saludó a todos y a todas, maestros y maestras, niños y niñas, acompañado de Martita y el gabinete propuesto para su administración, sin decir absolutamente nada de relevancia, sin hacer ningún análisis político, ni económico. Entre risas y chistoretes, sin pena, ni gloria, Fox no dejó nada, ni en esa ocasión, ni en ninguna otra, para la posteridad mediática.
La relación de Andrés Manuel con la prensa mexicana, especialmente con los acostumbrados entrevistadores del país, es decir, con los icónicos comunicadores de medios audiovisuales nacionales y con los canales de televisión tradicionales, ha sido ríspida. Tantito porque no hay entendimiento entre ambas partes; tantito, porque los medios tradicionales en México tienen aprendido un formato de estructura de ataque que consiste básicamente en empezar de mucho, ir bajando el tono y nunca, jamás, llegar a nada. Si acaso, poder exhibir al entrevistado para la posterior burla, memes y raiting, por algún error que pueda cometer, alguna medallita que se pueda colgar, etc., y tantito, porque a Andrés Manuel no le gustan las preguntas incómodas, ni directas, ni calientes. A él le gustan las afirmaciones positivas sobre su gobierno y nada más.
Para resumir lo bueno, lo malo y lo feo de su sexenio, AMLO buscó una periodista que hablara el mismo idioma que él: un idioma progresista, de izquierda, que conociera profundamente el discurso anti neoliberal de los mandatarios, cuyo perfil coincidiera con él.
Afinogenova es conocida en Rusia y América Latina por sus contenidos de apoyo a gobiernos progresistas de América Latina y los medios muy conservadores alrededor del mundo la han tildado de propagar la ideología socialista rusa, sin embargo, en la entrevista con el primer mandatario de México, simplemente se mostró de acuerdo con la política de programas sociales, combate a la corrupción y protección de los recursos naturales que profesa.
Bajo las condiciones políticas en las que se da la recta final de este sexenio de alternancia política y de discrepancias ideológicas, conceder una entrevista a un (a) periodista mexicano (a) sería una esgrima entre lo que se ha dicho, lo que AMLO dice haber hecho y las evidencias reales; el ataque, la defensa y una historia de México dolorosa. Linda, blanca, educada, muchacha rusa idealista, partidaria de “con el pueblo todo, sin el pueblo nada”, escucha atenta y sin dejarnos muy seguros de si ella es consciente o no, de las cosas reales que cambiaron y las que no, ni de cuánto el gobierno de AMLO se pareció al gobierno de Madero o si fue mejor o peor que los anteriores.
“¿Usted sabe que es el streamer hispanohablante más seguido en todo el mundo?”, preguntó la periodista al mandatario, sí, contestó él. Lo valioso de una entrevista con este estilo, es que no fue una entrevista ajedrecística en la que la calidad del periodista se mide por las veces en las que pone en jaque al rey, ni por la capacidad de respuesta política o diplomática que tenga ensayada el entrevistado, sino por ser una entrevista neutral, con parámetros ideológicos internacionales, históricos y literarios.
*Periodista egresada de la UNAM. Amplia experiencia en el campo laboral más por necesidad que por convicción. Amante apasionada de las causas perdidas, de las buenas historias, de la vida, la libertad y sus enjuagues. norvill_23@yahoo.com.mx