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Ernesto LUMBRERAS*

23 de enero de 2025, Zapopan, Jalisco

Muy querida Iliana,

En primerísimo lugar, me disculpo por no estar en físico en la presentación de tu bello Therion. La muerte de un amigo poeta con el que conviví por más de treinta años me tiene apático y misántropo, recluido en estos días en la lectura de sus libros. Ayer escribí un artículo en su honor que se publicará este próximo sábado. Al final del mismo escribí: “Como si fuera el último hablante de una lengua, con la muerte de un poeta se termina una versión del Universo, una forma particular de enunciarlo y de cantar su misterio perdurable”. Ahora que vuelvo a tus poemas corroboro lo dicho, cada poeta construye con distintos niveles de conciencia una lengua. El poeta ruso Joseph Brodsky siempre estuvo convencido de que si existe la musa o el ángel, estos moran al interior de la lengua.

Amparado por los espíritus tutelares de dos poetas griegos, de épocas distantes, Safo y Cavafis, tu libro se interna en el tiempo del mito, el tiempo de los comienzos. Claro, su título hace un giño a la célebre banda sueca de metal, Therion, palabra griega que significa “bestia”. ¿Estamos ante un monstruario? A mí personalmente me atrae por su sonido esa palabra que también me lleva a la última Thule, por los enigmas que convoca. Pero en efecto, las 28 figuras de tu libro trasudan su condición de bestias, algunas ya parte del imaginario colectivo occidental que han recorrido un largo camino de siglos para llegar a nuestro presente. El minotauro, la sirena, la hidra, la esfinge, el sátiro, la medusa y el centauro son, los más familiares, no sólo para un lector de Homero, Virgilio, Ovidio o Dante. Con sus metamorfosis y deformaciones, obra de la cultura mass media, estos monstruos trágicos nos habitan en el día a día, aparecen en nuestros actos cotidianos, surgen intempestivamente en nuestras sueños y pesadillas, aparecen en un poema también: “no volviste a dormir     después de recibir todo el vicio transparente de los dioses no es extraño que tu luz petrifique.”

En la poesía de los modernistas toda la mitología griega estuvo de banquete orgiástico en permanencia voluntaria. De los centauros de Rubén Darío a la sirena de Amado Nervo. Luego, con las vanguardias, las divinidades y los semidioses se ocultaron en las más remotas selvas. Sus lugares fueron ocupados por las locomotoras y los aviones, los trasatlánticos y las fábricas. Importaba el presente y el porvenir. Por eso, la aparición de un libro como Therion ­–hermano espiritual de los que viene publicando Christian Peña y el Poeta griego arcaico de Luis Felipe Fabre- merece celebrarse. La puesta en el presente del mito me atrae relacionarlo con los cien ojos del gigante Argos que sutilmente presentas en palabras de Hera: “cuando lo veo tan lleno de ojos     me derramo sobre cada página de mi larga historia”.

Actualizas el mito, colocas su irradiación en la problemática actual, en las encrucijadas del aquí y el ahora. Su estela heroica, en algunos casos, propone una iniciación apremiante, un reto por traspasar zonas de confort o espejismos impuestos por la cultura imperante del éxito y la superación personal. “sólo un gigante conoce el fuego”, dices en tu poema “Cíclope”. En un lenguaje trepidante, por momentos, imantando de seducción y, en ciertos pasajes de erotismo, los poemas de Therion tocan a las puertas de nuestros miedos y deseos para exigirnos vivir con intensidad. En las hijas de Nix, las Keres se expresa esa plenitud en la dualidad amor y muerte: “pero más intensa que mil soles estas tres mujeres ardorosas encuentran hombres para acariciarlos feroces durante las noches nuevas    con el corazón acompasado     con su sexo eléctrico como yeguas bajo la lluvia”.

Te mando un fuerte abrazo. Nos vemos pronto. Tu amigo y lector. EL

 

*Ernesto Lumbreras (Jalisco, 1966) *De la inminente catástrofe. Seis pintores mexicanos y un fotógrafo de Colombia de Ernesto Lumbreras, edición de la Universidad Autónoma de Nuevo León y de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México publicada en este 2021.Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte. l

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