EL DILEMA MEXICANO EN SEGURIDAD
Mtro. José María Villalobos Rodríguez
“En una dictadura, es frecuente que los mitos tengan más peso que los hechos”
– Ian Kershaw, historiador en su obra “PERSONALIDAD Y PODER”.
Nubes negras se empiezan a formar para el Subcontinente más violento del mundo. No está en la lejana África o en Oceanía, sino que nuevamente se luce Latinoamérica. Si hace 24 años se generalizó desde México hasta la Patagonia la práctica del soborno por contratos que aplicó ODEBRETCH (constructora brasileña, que ganaba toda licitación en que participaba) para que viniera luego el hallazgo de los llamados “PANAMA PAPERS” que desnudó el blanqueo de capitales de empresarios y políticos latinoamericanos de altos vuelos y sofisticada evasión/elusión fiscal viene, ahora, una mucho más compleja trama. Participan activamente mafias chinas, rumanas, españolas, argentinas, mexicanas, colombianas, coreanas, rusas, italianas, brasileñas en operaciones muy complejas para procesar los ingresos provenientes de contrabandos de bienes y personas, hackeos a tarjetas bancarias, extorsión a empresas y gobiernos, venta y compra de autos de lujo robados, secuestros, trata y tráfico de personas, robos a la alta escuela, sobornos a funcionarios públicos o partidos políticos, constitución de empresas fachada multiusos, falsificación de billetes, criptomonedas patito, manufactura y comercio de falsificación de artículos pirata, empresas de servicios computacionales especialistas en “bots” – multiplicadores de mensajes falsos – para engañar a la opinión pública, robo de identidad, falsificación de medicamentos (desde oncológicos hasta aspirinas), tráfico de autopartes y otras mercancías robadas.
La lista crece día a día. Y cabe recordar de qué manera se ha poblado un lugar como Miami en Florida o San Diego en California de nuevos ricos con sospechosas fortunas y llamativas mansiones. ¿Por qué esta proliferación delincuencial se da más en Latinoamérica? ¿Qué tiene nuestro subcontinente de atractivo para que pululen las prácticas ilegales de los cinco continentes?.
Lo acabamos de presenciar en la ejecución de Fernando Villavicencio, candidato a la presidencia de Ecuador, que fue blanco de al menos 40 balazos a bocajarro estando rodeado de un grupo de “guardaespaldas”, quienes facilitaron su muerte.
El alcance que hoy día tienen las alianzas entre grupos delincuenciales rebasa las fronteras y se erigen como una muy seria amenaza para quienes habitamos en Latinoamérica. Recuerden que en el juicio al Chapo Guzmán – cuyo grupo es mencionado en Ecuador siempre declaró ser “agricultor dedicado a tareas del campo”.
Todo el entramado que se necesita para operar complejas redes delincuenciales requiere de un entorno que le sea propicio, que les facilite la clandestinidad y la capacidad de ir operando con toda libertad a lo largo y ancho de un territorio. Este proceso es laborioso y conlleva sobornar autoridades migratorias, aduanales, policías de todo tipo, contar con abogados, médicos y contadores muy duchos para prevenir que les caiga el “peso de la ley”… e infiltrarse en los más altos círculos sociales, académicos, financieros y políticos transfronterizos.
Una vez que se ha tejido este blindaje sigue el recuperar rápido lo invertido y crecer en operativos que generen mucho efectivo (“CASH”) para generar crecimiento – a costa de lo que sea necesario. Si se trata de un periodista que incomode, pues se le elimina. Si hay un nuevo gobierno municipal, estatal o federal, pues se le compra, a los jueces lo mismo y de la policía se busca cooptarla para que traicione a la sociedad y sirva a quien le paga.
Para la parte operativa sobra gente dispuesta a dar golpe, a blanquear dinero, a apoyar operativos de fraude porque en Latinoamérica EL CRIMEN SÍ PAGA.
En la actualidad ya nada nos extraña de la audacia de nuestros violadores de toda ley. Igual diseñan, construyen y operan submarinos, “ordeñan” ductos de hidrocarburos, lavan miles de dólares bajo el disfraz de remesas o en simulación de contratos de obra pública. Son exitosos y cada vez se han ido apoderando de ciudades, ramos industriales, rutas logísticas en donde exigir pago de piso les da un flujo de ingresos seguros y creciente. Igual extorsionan a productores de aguacate en Michoacán que a tortilleros en Guerrero o traficantes de personas desde Chiapas hasta los estados colindantes con la Unión Americana.
Parecen no tener límite ni contrapeso formal que les detenga. No ha surgido un equivalente a ELIOT NESS que en Chicago frenó a AL CAPONE.
Las muy variadas mafias que se han enquistado en LATINOMERICA se distinguen por los mensajes que envían a la sociedad mediante la violencia extrema. Cuando ejecutan lo hacen con un exceso de fuego, utilizando sicarios desechables y plantando cara a la ciudadanía y sus gobernantes.
Una de las causas del éxito que tuvo BENITO MUSSOLINI en la Italia fascista fue la de expulsar de su país a las mafias de Nápoles que asolaban su territorio.
Para ello uso una red de inteligencia y toda la fuerza del estado. No solo tuvo éxito, sino que logró gobernar en una nación que era de las más caóticas de Europa. Esas mafias italianas se establecieron en la Unión Americana y tejieron mediante crueles ejecuciones rentables negocios fuera de la Ley.
Las excepciones en Latinoamérica en cuanto a contener la economía paraelela criminal han sido las repúblicas de Chile y Brasil, pero lo han logrado con mano dura y perseverancia, utilizando tecnología de avanzada y no encomendándose a un divino rostro o a una estampita.
Lo que a México le dio la naturaleza en su frontera con la mayor economía del mundo puede dilapidarse si no volvemos a tener seguridad en nuestras carreteras, ciudades, campo y si seguimos siendo fáciles presas de los numerosos grupos delincuenciales. No es un asunto de estadística saber con precisión cuánto y qué territorio está, ahora, fuera de control. Es tan grande México que es muy difícil prevenir delitos a lo largo y ancho de más de 2 millones de km2 y 126 millones de habitantes que por algo hay que comenzar.
Esperemos que en lo que viene del proceso electoral los candidatos sean más específicos sobre cómo piensan recuperar la seguridad perdida y sin la cual como el pájaro DODO nunca podremos despegar como nación.