ACCIONES Y OMISIONES: V INFORME DE GOBIERNO

Inseguridad creciente: Si lo que se busca es mentir con estadísticas, sobran maneras; pero a septiembre 2023 el 69% de los mexicanos estamos apanicados porque no hay seguridad en ciudades, carreteras, aeropuertos, puertos o en el medio rural. En 90 años no habíamos padecido tanto sobresalto a la población que ya no siente lo duro, sino lo tupido. Cualquier salida de casa de nuestros hijos ya nos preocupa, que como nunca se había visto desde Chiapas hasta Baja California, la prevención ante actos delincuenciales ha sido abandonada, dejando a su suerte a millones de personas. Esta situación inédita expresa de manera fehaciente el hecho de que solo el 0.06% del Producto Interno Bruto se invierta en seguridad. Es la proporción más baja de América Latina y el Caribe. Crecen las evidencias de que las ramificaciones territoriales de la muy organizada delincuencia se han dado con el apoyo u omisión de los tres niveles de gobierno. En la Ciudad de México – supuesto bastión de la seguridad ya nada asombra: desde persecución motorizada y asesinato de aquel que osa cambiar dólares en el Aeropuerto Benito Juárez hasta los antros en Polanco y Naucalpan, donde se narcotiza a la clientela para robarles. Las balaceras aún no cesan, van in crescendo. Ejecuciones por motociclistas se dan a diario. La extorsión a transportistas, comerciantes, taxistas, hoteleros, industriales creció en estos cinco años a niveles insospechados – resultando así en ser un componente que agrega fuerza a la inflación. El robo a los ductos de PEMEX ha ido creciendo y lo que hace la paraestatal es trasladar ese costo al consumidor de gasolinas, diesel o gas, incluida a la Comisión Federal de Electricidad que adquiere y usa el combustóleo para generar electricidad y a que más mexicanos mueran gracias a sus emisiones. En estos años se duplicaron las llamadas “empresas factureras” por lo cual se incumplió un compromiso federal con los contribuyentes.

Calidad de vida en salud a la baja. Mientras Dinamarca perdió dos semanas de esperanza de vida por la pandemia de COVID en México, fueron cuatro años. Se obtuvo el 4º. lugar mundial en fallecimientos proporcionales a la población y líder en permisividad de ingreso a extranjeros con o sin estar infectados. Se subestimó el potencial destructivo del virus. Hospitales públicos saturados, caos en vacunación, enfermos crónicos dejados a su suerte, escasez de medicamentos oncológicos y bajos salarios al personal responsable del cuidado de los pacientes. Hoy el salario bruto promedio anual de los médicos en México es de US$ 12,000 solo 1,000 dólares arriba de la India, pero lejano del de China (US$ 116,377), España (US$ 57,000) o Brasil (US$ 47,000). En Argentina solo ganan US$ 5,280 al año.

Nivel educativo naufragando. Al cancelar en 2022 los $5,000 millones de pesos anuales del presupuesto de las escuelas de tiempo completo en zonas de pobreza se afectaron a 3.6 millones de estudiantes que asistían a 25,639 planteles. Los rezagos educativos crecieron por el COVID cuando desertaron 5 millones de alumnos; la cereza del pastel ha sido el proceso irregular bajo el cual se elaboraron los contenidos de los libros de texto gratuito. Las clases a distancia fracasaron, pues solo el 45% de los alumnos tuvieron internet y acceso a computadora y hubo fallas en capacitación a maestros. Para ocultar el alcance del rezago, INEGI dejó de publicar información sobre el aprovechamiento educativo en clara violación a su tarea de transparentar cómo vamos en el tema.

Endeudamiento a la alza y tasas de interés reales estratosféricas. Según Hacienda, la deuda pública medida en pesos constantes de junio 2023 pasó de $ 9,963 billones de pesos el 18 de noviembre del 2018 a $ 11,91 billones; un aumento del 19.6 %. La deuda total del sector público federal (gobierno, empresas productivas, banca de desarrollo y otros organismos) creció 5.5% frente a un saldo de $ 14,189 de billones de pesos de noviembre 2018. El pago de intereses por la deuda total federal en el primer semestre 2023 creció 34% en términos reales, sumando $ 533,000 millones de pesos. Pese a altas tasas reales de interés ofrecidas, los capitales especulativos que tenían inversión en bonos de deuda de gobierno de AMLO pasaron de 40 al 15% en su participación, dando señales de desconfianza.

La petrolera más endeudada del mundo es nuestra. Este salto responde principalmente al fondeo extra a PEMEX por 720 billones, más una quita de pago de impuestos por 416 billones de pesos. Las viejas refinerías siguen sin mejorar en su productividad. Entre julio 2013 vencen bonos de Pemex en moneda extranjera por US$ 30,252 millones de dólares. El Gobierno Federal deberá de entrar al rescate a costa de los contribuyentes presentes y del futuro. A finales de junio 2023, PEMEX debe a proveedores cerca de US$ 39,800 millones de dólares, un incremento de 72.25% respecto a diciembre 2018 y su contribución al ingreso federal fue del 17% del total, cuando que entre 2013 – 2018 promedió 23%. Los bonos en circulación de PEMEX tienen que pagar 485, puntos base por arriba de lo que paga la deuda del país. Las reservas probadas de petróleo no han superado los 7 mil millones 300 de barriles desde 2019 por falta de mayor inversión en exploración.

Los proyectos consentidos y el fin de fiesta. Los recursos fiscales se han canalizado a los proyectos de la refinería de Dos Bocas, el tren de la ruta Maya y el Transístmico. El costo de la refinería de Dos Bocas (con capacidad de procesar 350 mil barriles diarios de petróleo) pasó de US$ 8,000 millones de dólares y podría alcanzar US$ 18,000 millones de dólares, ya que carece de un acueducto y de resolver cómo se van a transportar los refinados a los mercados de consumo. Los fondos que correspondían al mantenimiento del aeropuerto de la Ciudad de México fueron a parar al Aeropuerto Felipe Ángeles que tuvo un costo de $ 40 mil millones de pesos. Origen de grandes daños a los ecosistemas, el proyecto del ferrocarril de la Ruta Maya pudiera terminar costando cerca de US$ 22 mil millones de dólares y existen serias dudas sobre la recuperación de esta inversión. La gran pegunta ahora es: en qué van a parar los procesos electorales en México y Estados Unidos. Aquí seguramente distraerán fondos públicos y tendremos un escenario donde ya no se puede postergar más una profunda reforma impositiva en 2025.