Dra. Olga Monserrat HERNÁNDEZ*
La Diabetes se caracteriza por ser una enfermedad sileciosa que, en muchos casos, se manifiesta cuando existen complicaciones irreversibles como: enfermedad renal crónica, amputaciones, ceguera, entre otras.
La Diabetes es una deficiencia de insulina, total (Diabetes Mellitus tipo 1) o parcial (Diabetes Mellitus tipo 2), siendo esta última el resultado de un estilo de vida poco saludable incluyendo mala alimentación, sedentarismo y alteraciones como sobrepeso u obesidad. Cuando la diabetes ha hecho demasiados cambios y daño en la vasculatura pequeña, los pacientes acuden con ceguera, infartos, enfermedad renal, amputación de algún miembro. Todo ello se puede prevenir.
La Diabetes fue descrita por primera vez en el Papiro de Ebers (1550 a. C.) y en los Vedas hindúes, donde describen casos de orina pegajosa y con sabor a miel. En griego la palabra “diabetes” significa “correr a través” refiriéndose a la eliminación exagerada de agua, cuando se pensaba que la diabetes era causada por una falla en riñones. Con el paso del tiempo, investigadores y científicos han podido comprender sus causas y factores de riesgo para desarrollar nuevas opciones terapéuticas que hacen más fácil la vida de los pacientes.
Cuando una persona acude a consulta tiene muchas dudas, ideas de miedo que traen de generaciones previas que influyen en no querer aceptar el tratamiento de insulina, siempre prefieren una pastilla o seguir una dieta estricta para no aplicársela. La idea de utilizar insulina en la primera consulta los desconcierta, los preocupa y entristece, incluso más que saber que comienzan con deterioro en la función renal o que comienzan a tener cambios en los ojos asociados a retinopatía diabética. Se someten temporalmente a una dieta que al mes suspenderán porque “la vida sólo es una” y quieren seguir comiendo como todos los días.
Lo cierto es que vivir con diabetes es toda una experiencia, desde recibir el diagnóstico, compartirlo con la familia, aceptarla en tu vida, aprender a tomarse la glucosa, aplicarse insulina por primera vez con el miedo y dolor que conlleva hasta poner una alarma para recordar que debe tomarse las pastillas y acudir al médico para saber si existe alguna complicación que no haya percibido.
La diabetes debería respetarse como cualquier otra enfermedad porque requiere el mismo cuidado, afortunadamente nos brinda un rango de tiempo suficiente para conocernos, aceptarla y poder controlarla porque una vez que llega, no se va, nos acompaña hasta el último momento. Es por eso que invitamos a todas las personas a mejorar su estilo de vida, a caminar más. Debes estar seguro que hay muchas personas que nos preocupamos por tu bienestar y entiendas que vivir con diabetes no siempre es tan malo.
* Médico Internista.
Diabe-Med. Clínica Especializada en el tratamiento de Diabetes y Nutrición
Av. Lázaro Cárdenas 198, San Sebastián Tutla, Oaxaca
Cel. 9512281709