REPÚBLICA DOMINICANA ABRE UN NUEVO PUENTE CULTURAL EN LA FIL GUADALAJARA 2025


Por Mariana Navarro
“Nuestra América será grande cuando aprenda a reconocerse en la palabra del otro.”
GUADALAJARA, Jalisco.- La presencia de la República Dominicana en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2025 no solo marcó un momento histórico —al debutar con un stand oficial por primera vez en esta feria— sino que abrió una conversación profunda sobre el valor de la diplomacia cultural en tiempos donde los libros siguen siendo territorio de encuentro entre naciones.
El pabellón dominicano, cuidadosamente preparado y nutrido con obras provenientes del Archivo General de la Nación, del Banco Central y de editoriales independientes, ofreció a México una panorámica de su memoria escrita: poesía, ensayo, investigación histórica y narrativa contemporánea que dialogan con una identidad caribeña rica y compleja.
En este marco se realizó la conversación con Samuel Esteban, Primer Secretario de la Embajada de la República Dominicana en México, quien destacó que traer este acervo editorial al país es un acto de presencia y de voluntad política: “Los libros son nuestra carta de presentación ante el mundo”, expresó al subrayar que este debut en la FIL fortalecerá los intercambios académicos, las traducciones, la movilidad de autores y la proyección cultural de la isla en América Latina. Esteban hizo hincapié en que esta participación no es solamente un gesto simbólico, sino el primer paso de un plan diplomático de largo alcance para consolidar la presencia dominicana en foros internacionales.
La jornada reunió también a actores clave del ecosistema cultural, tecnológico y literario que acompañaron y enriquecieron el encuentro.
Entre ellos, Ricardo Muñiz, de ALARP Jalisco, una organización latinoamericana dedicada al fortalecimiento del liderazgo ético y profesional en la región.
Muñiz destacó que la presencia de República Dominicana en la FIL es un ejemplo de cómo la diplomacia puede convertirse en motor de desarrollo cultural y educativo, pues abre oportunidades de colaboración entre instituciones, universidades, cámaras empresariales y comunidades artísticas.
El diálogo se vio complementado por la mirada tecnológica de Mike Mo, presidente de Metaverse México, reconocido por su labor en la divulgación de innovación digital y en la construcción de puentes entre industrias creativas y entornos virtuales. Su presencia aportó una lectura contemporánea del fenómeno editorial: cómo la literatura dominicana puede encontrar nuevos públicos a través de experiencias inmersivas, plataformas digitales y estrategias de preservación cultural en entornos virtuales.
La escritora Noris Binet, una de las voces poéticas más sensibles de la literatura dominicana actual, sumó a la conversación un tono íntimo y luminoso. Su obra —que transita entre la memoria, lo espiritual y la experiencia femenina— resonó entre los visitantes como recordatorio de que la literatura es también un gesto de identidad compartida. Binet celebró la posibilidad de que la FIL abra sus puertas a autores caribeños, permitiéndoles dialogar con lectores y colegas de todo el continente.
Para quien firma estas líneas, como periodista cultural y tecnológica , acompañar este momento significó mirar de cerca el nacimiento de un puente. No solo se exhibieron libros: se tejieron relaciones, se escucharon historias, se pusieron en marcha futuros proyectos editoriales y se sembró la certeza de que el Caribe y México comparten raíces más profundas de las que imaginamos.
La Embajada de la República Dominicana expresó su agradecimiento por el recibimiento cálido del público jalisciense y por la oportunidad de ocupar, por primera vez, un espacio propio en la feria más importante del mundo en lengua española. Con esta participación, la nación caribeña se posiciona en el mapa literario internacional con una agenda clara: crecer, vincularse y compartir su patrimonio con la región.
Entre libros, voces caribeñas y miradas latinoamericanas, República Dominicana abrió un capítulo que apenas comienza: uno donde cultura, diplomacia y futuro escriben juntos la misma página.📑








