- “El día que a mí me desaparezcan ¡griten hasta que se queden afónicos, no dejen que me vaya en silencio!”: María Luis Estrada, periodista amenazada de muerte.
Nora VILLEGAS*
CDMX – “¿Qué fue tan importante señor Encinas, como para no haber asistido de forma presencial a este encuentro?”, preguntaban enojados los periodistas, dirigiéndose a la pantalla desde donde se proyectó la participación virtual de Alejandro Encinas Rodríguez, Subsecretario de Derechos Humanos, en el Primer Encuentro Nacional de Periodistas, llevado a cabo en el Teatro Daniel Zebadúa del Municipio de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el pasado 5 de marzo.
Encinas acercó la cara a la pantalla y esbozó una risita nerviosa que los asistentes interpretaron como una burla, “¡no te rías, esto es algo muy serio!, ¡deberías estar aquí cabrón!, ¡sólo te reúnes a solas!”, para terminar de calentar el ánimo de los asistentes, Encinas se desconectó de la reunión por un momento y cuando volvió la conexión, el periodista Jesús Lemus Barajas hacía uso de la palabra: “¡esto no es un acto golpista, no es una insurgencia, es un reclamo de nuestros derechos como periodistas! Queremos decirle al señor presidente de la República que nosotros estamos hasta la madre de estar escondidos, nosotros no somos los delincuentes y sin embargo, vivimos ocultos, estamos escondidos, viajamos de noche para que no nos vean porque nos matan!”.
Impotentes, temerosos de estar en México quienes llevan años desplazados en otros países, sin recursos ni apoyo mediático, entre llantos, gritos desesperados y reclamos; decepcionados expusieron la violencia estructural que rodea al ejercicio periodístico en México; desde violaciones de derechos laborales, precariedad de empleos, denostaciones públicas, hasta tortura, golpes y lo más preocupante, el aumento de asesinatos en los últimos meses, fueron expuestos al subsecretario de Derechos Humanos, a quien no dejaron hablar durante el tiempo que duraban las exposiciones de los compañeros y solicitaron que hablara hasta el final para que primero escuchara el problema.
Tanto el Mecanismo de Protección, como la Fiscalía General de la República utilizan estadísticas, estrategias y líneas de investigación consensuadas con las organizaciones civiles como Reporteros Sin Fronteras, Artículo 19 y el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés), sin embargo, muy pocas veces concuerdan con la realidad que cuentan los hijos, esposas y compañeros de periodistas asesinados, quienes señalan revictimización, falta de investigaciones robustas, negligencia de las autoridades para recabar las pruebas que lleven al esclarecimiento de los asesinatos.
“¡Justicia!”, “¡honor y gloria a los periodistas que han sido asesinados!” exigía la esposa del periodista asesinado en Chiapas, Fredy López Arévalo, recriminó al subsecretario que “las personas que encontraron encajueladas, no son los asesinos de mi esposo, por favor, tome cartas en el asunto”, solicitó la viuda.
Los periodistas advirtieron que la Fraternidad de Reporteros de México, firmaron una carta que esa mañana hicieron llegar al Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Gutiérrez, en la que lo exhortan a que convoque de nueva cuenta al gobierno de México a firmar un protocolo de atención y plan de acción con más de 60 recomendaciones para la atención de periodistas que desde 2012, el Gobierno de México se ha negado a firmar.
Con gritos de “¡inútil, renuncia Encinas, no eres derecho humanista, eres un verdugo de los periodistas, que renuncie Irazoque!”, los periodistas presentes pidieron la destitución inmediata de Enrique Irazoque y de todo su equipo, responsables del Mecanismo de Protección a Periodistas de la Secretaría de Gobernación, así como la revisión de las ONG’s que promueven la protección de periodistas y coadyuvan con el Gobierno mexicano en las investigaciones de agravios cometidos contra el gremio. Ninguna de las peticiones hechas ha sido atendida.
“¡Reflexione y por dignidad, renuncie cabrón, es usted un inútil”! pedían a Encinas entre sollozos los periodistas que han sido torturados, amenazados de muerte, auto exiliados, desplazados, que cuentan con protección del Mecanismo y aun así no sienten tener ninguna garantía de seguridad, ni de vida y mucho menos de justicia.
Durante el Encuentro Nacional, la más emotiva de las intervenciones fue la de María Luis Estrada “La Grillotina Política”, la periodista que denunció a través de una investigación periodística los nexos de Genaro García Luna con las empresas contratadas por el Gobierno para brindar protección, con la voz entrecortada, recordó las palabras de un compañero periodista de Jalisco, “a quien desaparecieron y apareció en pedazos, el día que a mí me desaparezcan, grita hasta que te quedes afónica, no dejes que me vaya en silencio”.
Encinas por su parte se comprometió a investigar y a llegar hasta las últimas consecuencias. Habló de la necesidad de implementar mecanismos de prevención y reformar la ley. A la invitación expresa de María Luisa Estrada para mostrarle las pruebas que demuestran los nexos entre RCU, empresa que brinda los servicios de protección de periodistas de la Secretaría de Gobernación y Genaro García Luna y su hermana Esperanza García Luna, el funcionario se comprometió a recibir a la periodista a la semana siguiente, lo cual tampoco ha sucedido.
* Periodista egresada de la UNAM. Amplia experiencia en el campo laboral más por necesidad que por convicción. Amante apasionada de las causas perdidas, de las buenas historias, de la vida, la libertad y sus enjuagues. norvill_23@yahoo.com.mx