Elsbeth LENZ*
XALAPA, VER.- En este mes, en el que todo es amor y enamoramiento, es cuando más nos damos cuenta, que nuestras expectativas respecto a una relación, son meramente irreales.
Vamos a ver, las mujeres crecimos con la idea del príncipe y luego llegó a nuestra vida Hollywood o Televisa y en ambos casos, los hombres y las mujeres de ambos creadores de contenido, no tienen nada que ver con la realidad.
Yo crecí viendo Sex & the city, para empezar es imposible vivir del sueldo de una columna semana, ni en Nueva York, ni en México, ni en ninguna parte del mundo; luego está el aspecto hombres, todos los galanes que salen en la serie son guapos, altos, trabajadores e irradian el éxito en sus vidas; muchos de ellos andan entre los 30 y muchos y 40 y pocos, yo los hombres heterosexuales, que conozco en ese rango de edad, algunos están casados y muchos otros divorciados y quebrados, con broncas con la custodia de los hijos y la pensión, ya de guapos y altos mejor ni hablar.
Luego está el que las relaciones heterosexuales, son tan demodé, que es casi imposible, en el caso de las mujeres heterosexuales, encontrar una pareja decorosa, estos tres últimos meses, no sé si la gente por la pandemia, salió del clóset o que pasó, pero he visto que 12 parejas LGTBQ+ empiezan una relación, contra 2 divorcios heterosexuales.
Lo trágico de todo esto, es que algunos de nosotros seguimos siendo heterosexuales y cada día resulta mucho más complicado, encontrar una pareja que llene nuestras expectativas, principalmente porque esas expectativas que tenemos en mente, son producto del mentado marketing del amor y no de la realidad.
De momento lo mejor será celebrar a Sam Valentín, sin expectativa alguna, pero fieles a nuestro género, el que sea que tengamos.
*Mercadóloga de profesión y columnista por elección; apasionada de la razón y profunda admiradora de la coherencia, confieso padecer una profunda aversión al machismo. Sígueme en mis redes sociales @elsbeth_lenz