Sin duda alguna actualmente Manolo Jiménez es la carta más fuerte del PRI rumbo a la gubernatura de Coahuila. No hay político priista que le iguale en lo que ha logrado; por lo que lo han puesto en los cuernos de la luna. Manolo es uno de los alcaldes mejores avaluados del país en el combate al COVID-19, solo por debajo de Miguel Bernardo Treviño de Hoyos (San Pedro Garza García) y de Enrique Vargas del Villar (Huixquilucan); y por encima de María Eugenia Campos (Chihuahua). Cabe destacar que desde que inició la pandemia, Manolo apoyó en todo al gobernador Miguel Riquelme. Tan es así que de acuerdo con el Reporte Coahuila del Plan Estatal de Prevención y Control COVID-19 del pasado lunes a las 7 de la tarde, en Torreón se habían contagiado 35 personas en un lapso de 7 horas. Y a las 12 horas del mediodía del lunes iban 29 más. Es decir, en un solo día Torreón tuvo 64 contagiados con el COVID-19. Carajo, mientras Saltillo tenía 252; San Pedro 257; Monclova 412; y Torreón 704, se ve a leguas que en esta última ciudad los contagios crecieron de manera exponencial. Casi 3 a 1 comparado con la capital del estado. Claro que las autoridades municipales tienen mucho que ver.
JAVIER, CLAUDO Y SANTANA ARMANDO
Ahora bien, sin temor a equivocarnos, de seguir con el mismo tren de trabajo y de continuar Manolo dando plausibles resultados, el PRI repetiría en el mando estatal. Claro que el alcalde saltillense sería la mejor carta, aunque no se debe descartar –de último minuto– a políticos como Eduardo Olmos o José María Fraustro Siller. Por el lado del partido en el poder (Morena) se apuntan tres como probables candidatos: Javier Guerrero, Claudio Bres y Luis Salazar. El primero sampetrino de nacimiento y alcalde de su tierra. Tres veces diputado federal Javier es un político ordenado y metódico. Cabe destacar que Javier ha hecho bien las cosas, por lo que podría superar al bigotón senador Santana Armando Guadiana Tijerina, que dicho sea de paso, cuando se celebre la elección va cumplir 77 años de vida. Ello lo inhabilitaría por lo que desde ahora él mismo se da por descartado. Otro es Claudio Bres, tres veces alcalde de Piedras Negras y de buena aceptación popular. Por cierto, los tres –Javier, Santana Armando y Claudio– fueron furibundos priistas en sus buenos tiempos. Dentro del PRI es cuando consiguen los cargos públicos, salvo los últimos puestos de Guadiana y de Bres. Javier, quien se recupera de un COVID-19 en su casa, es el segundo de a bordo en el IMSS nacional. Pronta recuperación Javier.
SALAZAR TAMBIÉN QUIERE
Por lo que respecta a Luis Salazar él es un neomorenista, el último que se ha integrado a este movimiento. Salazar ha sido senador de la república y diputado federal por el PAN, partido al que renunció tras 21 años de militancia. Luis, solo si logra obtener la candidatura a la alcaldía de Torreón y de ganar esta, podría acceder a ser candidato a la gubernatura. Cercano a Mario Delgado que es el coordinador de los diputados morenos en la Cámara, y de ganar la dirigencia nacional del partido; Salazar podría ir de gane y enfrentar a priistas y panistas cuando sea el relevo de miguel Riquelme.
¿DÓNDE DEJAN A MEMO?
Por cierto, ¿en dónde dejamos a Guillermo Anaya si él es el santón que quita y pone dentro del Partido Acción Nacional? Bien; si se mandan practicar encuestas entre Marcelo y Memo sobre preferencias electorales, Marcel se lo lleva de calle. Sobre todo porque Marcelo no tiene pasivos, no tiene cola que le pisen. Es que Marcelo Torres Cofiño es la mejor carta del panismo en Coahuila. Vamos, él no es un Dálmata como Memo que está condenado a perder la cuarta elección consecutiva en caso de que se decidan por él. Por su parte Chuy de León no alcanza a dar el brinco para la elección. Como que le queda muy grande el caballo. De ahí que Marcelo sea el candidato natural. Así se presenta el panorama –hasta ahora– en Coahuila. Claro, todavía falta mucho, pero la verdad sea dicha, ya los calefactos se están preparando para cuando lleguen los nuevos tiempos. Órale.
VIESCA NO ES PUEBLO MÁGICO, ES PUEBLO FANTASMA
En tema local. La insensible y fría presidente municipal de Viesca, Nadia Jaramillo, se atrevió a mandarles una pipa con agua a los viesquenses que tienen más de dos semanas sin el vital líquido. Pero permítame decirle; sucede que ésta pésima alcaldesa se atrevió enviarles una pipa–propiedad de su esposo— para contrarrestar la situación. El asunto es que la pipa había cargado anteriormente materiales peligrosos, lo que no le importó a Nadia enviarles el agua en esas condiciones. Es decir, le importó poco o nada la salud de su pueblo. Cabe destacar que los pobres viesquenses recogieron, de color amarillento y con un pésimo olor el agua que les envió. Huelga decir que la alcaldesa “no ha tenido tiempo” para recibir a una comitiva que quiere plantearle la situación tan grave que padecen. Además, ella en muy pocas ocasiones acude a su oficina a tratar asuntos que le competen a su cargo, por lo que Viesca se encuentra en el peor de los rezagos. Por cierto, el esposo de la alcaldesa es el que reparte el “agua potable” ya que el maneja el armatoste; por lo que se le puede encontrar en la plaza principal del pueblo “atendiendo a la gente”. Carajo, Viesca más que un Pueblo Mágico, parece un Pueblo Fantasma. Y todo porque cada vez que acuden los comisariados ejidales a la presidencia municipal, no hay nadie que los atienda. Por ejemplo, gente que ha acudido a la presidencia municipal en tres ocasiones –en una semana– se ha encontrado con la novedad de que no solo la alcaldesa no estaba; ni Juan Manuel Nava, secretario del Ayuntamiento; ni Fulgencio Muruaga, tesorero municipal; ni Rubén Murillo, director de Obras Públicas. Es decir, las oficinas de la presidencia municipal están prácticamente abandonadas. Por eso, Viesca no es un Pueblo Mágico, sino un Pueblo Fantasma.
NADIA JARAMILLO; PÉSIMA ALCALDESA
“Tenemos días que no tenemos agua, desgraciadamente no hemos tenido respuesta de la alcaldesa, tristemente estamos viviendo esto en la cabecera y nos vimos en la necesidad de venir hasta acá (a Saltillo), ahorita tuvimos la reunión con el licenciado (Antonio) Nerio y nos ha tratado muy bien. Ya nos dio una posible solución al problema, aquí andamos, pidiendo que nos auxilien, porque llevamos 12 días sin gota de agua (…) Hace días la alcaldesa estuvo repartiendo agua en el municipio, pero esta señora utilizó una pipa donde tiene en la parte trasera la leyenda de material peligroso, el agua salió en pésimas condiciones, amarilla, no sé si por la condición de la pipa, pero hay muchas sospechas, es algo que puede ocasionar problemas de salud muy graves”, señaló para el Heraldo de Saltillo el ingeniero Enrique Guzmán. El caso amerita la solución inmediata de las autoridades estatales ya que a las municipales de plano no les intereso este problema. Estaremos al pendiente.