LOS JUBILADOS DEL ISSSTE CLAMAN POR LA INTERVENCIÓN DE LA PRESIDENTA SHEINBAUM

Pedro Martínez Lara

Hace unos días me llegó a mi celular un mensaje de una hermana que vive en Xalapa, Ver., en el cual los pensionados y pensionadas del ISSSTE (maestros, médicos, enfermeras, técnicos y trabajadores administrativos) andan circulando  a manera de queja que se enteraron del aumento del salario mínimo decretado para 2025 y que asciende al 12%, según la Secretaria del Ramo; sin embargo,  a quienes somos jubiladas y jubilados del ISSSTE  solo nos darán un incremento en nuestras magras pensiones del 4.82 % de acuerdo al índice nacional de precios al consumidor en el presente año 2024; así lo establece el Articulo 8º del Reglamento de Pensiones  del  referido organismo, sujetas  al Articulo Decimo Transitorio y con ello, seguiremos sufriendo el deterioro en nuestras prestaciones sin que los  flamantes representantes sindicales y del  Poder Legislativo muevan un dedo para reformular una verdadera Reforma a la Ley del ISSSTE(a ver que hace el nuevo Director Martí Batres), basada en estimaciones  actuales,  ya que a la fecha tenemos un serio deterioro del 56% en nuestras percepciones, en cambio el dirigente del SNTE sí gozará de 90 dias de aguinaldo más un sustancial aumento a su ya de por sí abultado  ingreso salarial. Creo que lo mismo sucederá con las y los líderes de la democrática CNTE.

Quienes sobrevivimos en la medianía que nos otorga nuestra pensión mensual nos dirigimos con mucho respeto y cordialidad  a la Presidenta de México  para  que recuerde que ella también fue maestra y su  señora madre  lo sigue siendo,  aunque  parece ser que   ya está  jubilada también, y nos apoye para tener un ingreso digno que nos permita vivir con bienestar en esta que es la ultima etapa de nuestras vidas;  que nos nivelen las pensiones a lo que reciben las y los trabajadores jubilados del IMSS donde un médico jubilado gana más de 52 mil pesos, mientras que en el ISSSTE solo reciben 32,000 pesos (como sueldo máximo). No es justo que  nosotros que también nos preparamos para ser eficientes en nuestro desempeño profesional y nos esforzamos por cumplir a cabalidad con las comisiones que nos fueran encomendadas por nuestros superiores, ahora estemos recibiendo pensiones de hambre y todavía tengamos que comprar nuestros medicamentos porque no hay suficiencia o se acaban cuando llega uno a solicitarlos.

Ya es conveniente que se haga algo por quienes dimos nuestro mejor esfuerzo durante toda la vida laboral, para que ahora estemos tan olvidados y discriminados con respecto a otros jubilados de lujo, como los de PEMEX Y CFE. Protestamos lo necesario y pedimos que ya se eche abajo lo que implantó el tristemente célebre ex presidente  Zedillo,  de pagarnos nuestras pensiones calculadas en UMAS, cuando en nuestras concesiones  de pensiones del ISSSTE aparece que deben ser pagadas en salarios mínimos.

Saludos Navideños a todas y todos los jubilados proletarios  y que  Martí Batres se ponga a trabajar, pero en serio.

 

 

 

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