Michelle PINO
Diciembre, último mes del año y con ello se concluyen los primeros 12 meses del actual gobierno, uno en el que palabras hay muchas, hechos muy pocos, pues a decir del titular del ejecutivo oaxaqueño, nuestro Estado es uno de los más seguros, un lugar en donde se ha visto avance y desarrollo a partir de su administración y aunque sabemos que Roma no se hizo en un día, como reza el dicho, la realidad es que algo se debería haber avanzado en estos primeros meses.
Por ejemplo, en lo que se refiere al tema de la perspectiva de género, el gobernador en repetidas ocasiones ha dicho que el tema de las mujeres, es un tema medular de su administración, sin embargo, de acuerdo con información, proporcionada por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) y que circuló a finales del mes pasado con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, de enero a octubre de 2023, en nuestro Estado se registraron al menos 38 casos de feminicidio, colocando a Oaxaca en el sexto estado con más víctimas.
Estas cifras son por demás preocupantes, ya que, si se revisan las estadísticas correspondientes a los mismos meses de la administración anterior, se observará que el panorama lejos de mejorar empeora, que a pesar de que desde hace ya un tiempo se ha declarado una Alerta por Violencia de Género en el Estado, las acciones siguen siendo insuficientes para poder disminuir y erradicar la violencia que día a día las mujeres oaxaqueñas enfrentamos en sus diferentes modalidades.
Si bien sabemos que en un año no se va a revertir una problemática que desde hace tiempo se ha considerado una problema de salud mundial, denominando por ello a la violencia contra las mujeres una pandemia, es verdad que si tanto se dice que este gobierno no es más de lo mismo, se debieron implementar ya medidas precisas para al menos comenzar a frenar la violencia contra las mujeres, pero tristemente, lo que se observa es que incluso personas del gabinete siguen sin al menos intentar utilizar el lenguaje incluyente.
Por si eso fuera poco, aunque el tema se ha silenciado, no es un secreto que dentro de la administración pública actual se ha identificado a más de un personaje al frente o colaborando en las instituciones gubernamentales que suelen acosar laboral y sexualmente a las mujeres, quienes a pesar de conocer sus derechos y saber que eso esta penado por la ley, no han encontrado la justicia a sus reclamos y sus violentadores continúan en sus cargos como si no sucediera nada.
Es indispensable que el actual gobierno, como lo dice de palabra, se comprometa en la realidad y hechos con la ciudadanía y garantice el bienestar de las mujeres oaxaqueñas, con la seguridad de la población en general, que comience a demostrar que es verdad que no son más de lo mismo y lejos de pagar cuotas a quienes participaron y patrocinaron la campaña para el logro de la gubernatura, comience a revisar si las personas en cuyas manos a puesto el funcionamiento de las diferentes instituciones que integran el gobierno, cuentan con los conocimientos y habilidades necesarias para enfrentar las responsabilidades que sus cargos les exigen, que comience a destinar los recursos para lo que son y se eviten desvíos so pretexto de la “austeridad” para comenzar a dar los resultados que la sociedad espera, no solo por que es la obligación de quien lleva las riendas del estado, sino también, porque en un año de elecciones, para las y los ciudadanos hay omisiones que no se pueden esconder y pretender que son parte de lo que no se ve…
*Licenciada en Comunicación, con maestría en psicoterapia humanista, en su experiencia profesional ha combinado la Educación y la Comunicación, disfruta escribir y decir lo que piensa. pino.michelle@gmail.com