“Todos tienen la oportunidad de hablar en la conferencia mañanera, si no, no hiciéramos esto…”
Nora VILLEGAS*
CDMX. – “Usted se ha dedicado todos los días a denostar periodistas”, reprochó la periodista Reyna Haydee Ramírez al presidente Andrés Manuel López Obrador en la conferencia mañanera, el pasado 21 de julio, al hacer uso de la voz.
Al tomar el micrófono, Reyna Haydee aseguró que el mandatario confunde “porque la independencia periodística sí existe y hay muchísimos medios en todo el país que se dedican a eso, entre esos yo.” Quien está confundida es la reportera. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México laboran como periodistas más de 40 mil personas, de las cuales el 79.4% están agrupadas en el rubro de trabajadores subordinados y remunerados, mientras que el 20.6% trabajan por cuenta propia o son empleadores, trabajadores sin pago y otros.
Ser freelance no es ser independiente. Ser independiente implica no formar parte de ningún medio de comunicación que tenga establecidas líneas editoriales, editores o directores que comercialicen sus espacios para el pago de gastos operativos y administrativos como empresa de información. En cambio, ser freelance, significa formar parte de algún medio de comunicación, escribir o realizar colaboraciones periodísticas para uno o varios medios, a cambio de una retribución económica, que, aunque no forme parte de la plantilla laboral, son contratados como prestadores de servicios.
Actualmente, Reyna Haydee escribe para el medio digital A pie de página, ha colaborado para El Imparcial de Hermosillo y para El Reforma, lo que la hace una colaboradora freelance y no, independiente. El periodismo independiente es una actividad sin respaldo de una empresa de medios y tiene como principal objetivo la democratización de la información, el uso de plataformas digitales y el financiamiento propio de los trabajos de investigación.
La reportera señaló que la conferencia mañanera es para tratar “temas que interesan, no solo a Sonora, sino al resto del país, a las comunidades indígenas, etcétera, usted lo sabe”, señaló y de pronto, de la nada, inició un discurso diferente al tema principal: “pero aquí no se aplica señor presidente, porque si fuera como usted dice, su hubiera democracia, yo entraría todos los días y entro una vez al mes, dos veces, si hubiera democracia, no se reservarían lugares para algunos reporteros, son 20 espacios, todos tendríamos derecho una vez a la semana de hablar, pero no porque usted prefiere las alabanzas…”, afirmó.
A juicio de la periodista, “los reporteros que vienen aquí, le dan por su lado y se ponen de pechito para que batee de jonrones y yo no soy así presidente, yo soy reportera”, afirmó, denostando, precisamente, los cuestionamientos y participaciones de los demás reporteros que acuden a la mañanera a realizar su trabajo. Consignó ante las cámaras de televisión que el presidente “no censura, que castiga” y que a ella la había castigado, no dejándola entrar desde hacía tres meses al Palacio Nacional.
Después de increpar al presidente, por no dejarla entrar durante tres meses, le exigió a López Obrador que informe y que cumpla su palabra de impunidad cero y que no replique los informes que recibe de las Fiscalías corruptas “usted se enoja también porque dice ‘esto no es de formas’, por supuesto, yo estoy totalmente de acuerdo, no es de formas, es de lo que interesa y lo que interesa, a usted le causa enojo y molestia”, afirmó.
Después de numerar varios temas de su agenda periodística, Reyna terminó su intervención diciendo “no se enoje, yo no soy su enemiga, ni su detractora, pero no pueden hablar aquí de impunidad cero”.
Cada mañana, en el suntuoso salón Guillermo Prieto del Palacio Nacional, antiguamente área de pagos de la Tesorería de la Federación, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, recibe a un heterogéneo grupo de reporteros, a quienes informa y escucha los asuntos y actividades presidenciales. Durante la conferencia se informan avances de las obras, actividades del gabinete, resultados en las estrategias institucionales en materia de salud, seguridad, energía, hacienda, cultura, educación, entre otros temas que nutren posteriormente la información para los medios de comunicación.
La conferencia presidencial es televisada y transmitida por redes sociales, tan solo, la plataforma Youtube registra 3.35 millones de suscriptores, más de 550 mil reproducciones en promedio por cada conferencia. Resulta entonces ingrato señalar al presidente de antidemocrático, autoritario o vanidoso, porque no permite la entrada al Palacio Nacional a todos aquellos periodistas que tienen algo que les preocupa, un tema que no se ha resuelto o simplemente, un amparo que no salió favorable para quien quiere entrar todos los días a la mañanera, pero afirma no contar con recursos para trasladarse diariamente de Sonora a la Ciudad de México como Reyna Haydee Ramírez.
*Periodista egresada de la UNAM. Amplia experiencia en el campo laboral más por necesidad que por convicción. Amante apasionada de las causas perdidas, de las buenas historias, de la vida, la libertad y sus enjuagues. norvill_23@yahoo.com.mx