La inteligencia del pestañeo: Reflexiones sobre la IA y su impacto en la humanidad
Cynthia Paredes
Periodista
Licenciada en Comunicación Social
Directora General Actitud Vinícyma
VALPARAISO, CHILE.- La Inteligencia Artificial, que yo también bautizaría como la ‘Inteligencia del pestañeo’, ha revolucionado la forma en que vivimos y trabajamos. Con solo una breve solicitud, puede entregar y armar diferentes informaciones y tareas que antes habrían tomado horas o días. Todo ahora está listo en un abrir y cerrar de ojos. Sin embargo, debemos reflexionar sobre los impuestos o factura que nos pasará esta instantaneidad, ya que nada es tan gratis como se anuncia.
Por un lado, los trabajos se hacen más rápidos, pero la cantidad de información que recibimos también es más rápida y mayor. ¿Estamos preparados como humanos para recibir y analizar tanta información? ¿Y si se asume en los trabajos que con la llegada de la IA se puede agregar más carga que la habitual? Esto puede llevar a un aumento del estrés y una peligrosa fatiga laboral.
En el caso de los niños, la situación es aún más preocupante. ¿Estarán ellos preparados para recibir y analizar tanta información y de manera tan rápida? Es ahí donde se debe trabajar ahora desde distintas áreas para revisar la metodología de enseñanza con la llegada de la IA. Debemos repasar qué es lo mejor para la mente de las niñas, niños y adolescentes.
Sin embargo, también debemos reconocer que la tecnología nos ofrece un nuevo desafío como humanidad, y que podemos aprovechar su avance para mejorar nuestras vidas. La rapidez y eficiencia que nos brinda la IA nos podría permitir tener más tiempo libre para compartir en familia, para disfrutar de actividades que nos gustan y para cuidar nuestra salud mental y física.
Es importante abordar estos desafíos de manera proactiva, asegurando que la IA se utilice de manera responsable y ética en la educación. Para ello, debemos fomentar habilidades críticas y de resolución de problemas, así como la creatividad y la empatía. Algunas propuestas que se me vienen a la mente para lograrlo son:
- Revitalizar los trabajos manuales y artísticos, como la pintura, la escultura, la cocina, etc.
- Recuperar los juegos tradicionales y la actividad física al aire libre.
- Rescatar la lectura análoga, ya que leer un libro en formato papel es una experiencia diferente a leerlo en un celular. La lectura análoga permite una mayor concentración y retención de la información.
- Organizar torneos de debate entre colegios para fomentar la argumentación y la resolución de conflictos.
- Escribir ensayos literarios breves en clase para desarrollar la creatividad y la expresión escrita.
- Implementar proyectos de servicio comunitario para fomentar la empatía y la responsabilidad social.
- Crear espacios en las universidades para la reflexión y la meditación, para ayudar a los estudiantes a manejar el estrés y la ansiedad.
Al trabajar juntos para aprovechar al máximo los beneficios de la IA y minimizar sus riesgos, podemos crear un futuro más equilibrado y sostenible. Un futuro donde la tecnología nos ayude a vivir mejor, no a sobrevivir. Un futuro donde podamos disfrutar de la velocidad y eficiencia que nos brinda la IA, sin perder la esencia de lo que nos hace humanos.