Armando Eboli ZAPATA
PUEBLA, PUEBLA.- Tras el primer informe de gobierno de Claudia Sheinbaum, parece que finalmente empieza su gobierno, pues el año anterior parecía tener todavía las prioridades y agenda de Andrés Manuel López Obrador. Pero no podemos hablar del gobierno de Sheinbaum, sin mencionar que le ha puesto un énfasis a la seguridad. Es verdad que Donald Trump ha presionado mucho a México para tener resultados, pero la presidenta ya traía consigo a Omar García Harfuch, el famoso súper policía de la Ciudad de México. Por lo tanto, la presión de Estados Unidos solo ha empujado aún más los planes ya existentes componer el pésimo estado de la seguridad en México.
MORENA más que un partido, es una gran alianza de liderazgos nacionales y locales, casi todos los políticos de peso están dentro de la coalición. Andrés Manuel no quiso tocar esa alianza, por gobernabilidad, por engrosar el aparato de MORENA, por aplastar cualquier fuerza opositora. Pero al afianzarse MORENA como partido hegemónico parece que Claudia ha adquirido la confianza para barrer la casa, aunque parezca que el Estado se persigue a sí mismo.
El sexenio pasado era penoso ver a Andrés Manuel defender lo indefendible en las mañaneras, y Claudia ha copiado algo de su estilo, aunque con un elegante, “no quiero entrar en polémicas” nos ha ido avisando quienes son sus menos favoritos. Por otro lado, la libertad con la que actúa Harfuch nos ha mostrado una forma popular de ir poniendo disciplina en un partido que no la respetaba y añoraba todavía a López Obrador. Por ejemplo, el golpe de mesa dado al contrabando de combustible conocido como “Huachicol fiscal” ha sido enorme, porque apunta a las ramas más altas de la secretaria de Marina, antes intocable, y la investigación se detiene en el ex secretario de marina de AMLO, Rafael Ojeda, porque así lo ha decidido la presidenta, tal vez para evitar manchar la imagen del expresidente.
Luego el caso de la Barredora, también muy mediático y quizá sí, con un poco más de presión de los Estados Unidos, es un caso que afecta directamente a Adán Augusto López, hombre de confianza de López Obrador, coordinador de los senadores de MORENA, también un rival dentro del partido. Probablemente tampoco lo tocará la justicia, porque este tipo de justicia selectiva tiene como objetivo, además de luchar contra la delincuencia disciplinar a esos personajes que, heredados por López Obrador, dificultan la capacidad de gobernar de la presidenta y esta, no teme usar su mejor arma, al súper policía Harfuch.
*Licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y pasante de la maestría de Periodismo Político por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Interesado en relacionar arte con política. De gustos altermundistas pero acostumbrado a vivir en un mundo neoliberal.
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