Cuando el rico se hace más rico y el pobre se hace más pobre

 Toño SALDAÑA*

 BARCELONA,ESP.-¿Te has fijado que hay gente a la que le va muy bien e incluso ante los problemas siempre sacan algo bueno? y uno se pregunta ¿cómo le hacen? por qué también están las otras personas a las que les llueve sobre mojado. Hace varios años científicos investigaron el por qué algunas personas, ante situaciones adversas, obtienen resultados positivos demostrando mayor resiliencia y entereza adaptativa, mientras que a otras les pasa todo lo contrario. El sociólogo estadounidense Robert K. Merton en 1968 fue el primero en analizar el llamado “Efecto Mateo” nombrado así por la cita del evangelio de San Mateo que dice textualmente:

 

“Porque al que tiene se le dará y tendrá en abundancia;

pero al que no tiene incluso lo que tiene se le quitará”.

Mt 13:12

Descartando la interpretación bíblica (que no viene al caso en este artículo) te cuento lo que los científicos descubrieron: Imaginemos que en nuestro interior hay una “pila” que se recarga con experiencias positivas, cuando pasamos por alguna situación adversa o complicada esta “pila” se activa para que podamos afrontar lo sucedido con resiliencia y seguir avanzando, ahora imaginemos que esa misma “pila” está en rojo y para afrontar una mala experiencia se requiere de una fuerte dosis de ánimo, energía y coraje, al no tenerlos sólo conseguimos hundirnos más. Parece imposible o incluso “místico” pero no lo es, se comprobó que tener frecuentemente pequeñas dosis de experiencias positivas hacen que esa “pila” se recargue para conseguir ese subidón de poder en ti. El “Efecto Mateo” nos dice que lo que tengamos se multiplicará pero para que esto pase tenemos que ser conscientes de las cosas más simples y cotidianas que experimentamos, por ejemplo, si caminar descalza te hace sentir bien sé consciente en ese momento del placer que te produce y disfrútalo, igualmente si escuchas música, cuando bebes una taza de café o acaricias a tu mascota, el ver sonreír a alguien, oler un perfume, sentir los rayos del sol en tu piel o incluso hacer una inhalación profunda sintiendo como se llenan tus pulmones, son cosas cotidianas que contribuyen para que esto suceda, el ser consciente del momento de placer y la frecuencia con que lo hagas hará que quede registrado no solo en el cuerpo sino en la mente.

El placer consciente va de la mano con el agradecimiento, juntos hacen que mejore la autoestima, previniendo depresiones, ansiedad y angustia, entre otros, además, nos ayuda a recargar esa “pila” para usarla cuando más la necesitemos, sin olvidar que, nos sirve para ver todo lo que tenemos y aparentemente no valoramos, por ejemplo: respirar, ver, tener manos, un trabajo, oídos, tener una cama, etc., olvidándonos por un instante de los deseos del ego y agradeciendo verbal y mentalmente lo que tenemos dejará en nuestro interior una sensación de bienestar invaluable.

Ser conscientes de las emociones positivas y de lo que las genera contribuirá a mejorar tu sistema inmunológico, tu poder de socialización, la creatividad, el amor, etc., todos esos “pequeños placeres” que vivimos día a día nos generan muchas más cosas buenas a largo plazo, el “Efecto Mateo” nos dice que la abundancia te llegará porque estás preparada para encontrarla, verla y disfrutarla, no es cosa de magia es por el simple hecho de que al cambiar tú también cambian las rutas neuronales de tu cerebro y la forma en que percibes la vida.

Recuerda que en lo que centras tu atención aumenta y como dijo Mateo: …lo tendrás en abundancia.

* Licenciado en Diseño Gráfico con Maestría en PNL e Inteligencia Emocional. Especializado en pintura y expresión gráfica, Restaurador de Arte. Artista Plástico multidisiplinario con más de 25 exposiciones individuales dentro y fuera de México.

IG: tonosaldanaartista YouTube.com/c/TonitoBonito

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