- Con estudios como La política educativa de México, desde una perspectiva regional, el INEE participa en el debate por la mejora de la educación: Teresa Bracho.
- La pobreza, uno de los principales obstáculos para que el país otorgue enseñanza de calidad, coinciden expertos en la materia.
México vive un momento de grandes cambios que dan contexto a un enriquecedor debate sobre el futuro de la educación del país. Un diálogo que en todos los casos produce importantes aprendizajes y que permite gestar las ideas que darán pie a los próximos cambios, destacó la consejera presidenta de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Teresa Bracho González.
Al dar la bienvenida a los asistentes a la mesa de análisis La política educativa de México, desde una perspectiva regional, señaló que con el propósito de aportar a ese debate y a la mejora de la educación, el INEE y el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IIPE) de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Buenos Aires, unieron esfuerzos para realizar un estudio que permite mostrar al sistema educativo mexicano como resultado de una larga historia que no ha parado de crecer y consolidarse.
Dijo que, aunado a ello, otorga una perspectiva regional que muestra el lugar de México en la dinámica de los sistemas educativos de América Latina.
Al presentar los resultados del estudio que lleva el mismo nombre de la mesa, Néstor López, coordinador de Investigación y Desarrollo del IIPE, señaló que México enfrenta dos grandes desafíos: garantizar el derecho a la educación en un contexto de profundas desigualdades estructurales y de gran diversidad cultural e identitaria.
Destacó que el análisis muestra como características del sistema educativo mexicano: crecimiento sustantivo de la oferta, reducción de disparidades, persistencia de profundas desigualdades estructurales y serios problema de aprendizaje.
Luego de destacar que México cuenta con un sistema educativo dinámico que mejora y crece, resaltó que en este país es más difícil educar que en otros de América Latina, dadas su condiciones sociales, culturales, económicas y de dispersión territorial.
Néstor López consideró que otros dos retos que tiene México son la educación preescolar y la media superior. En la primera ha quedado fuera del debate que se da en la región latinoamericana, ya que hay pocas políticas específicas orientadas a los niños y niñas de 0 a 5 años. En educación media superior se registran mayores esfuerzos a través de políticas que incentivan la permanencia de los adolescentes en la escuela, subrayó.
Finalmente, manifestó que ojalá México salga del análisis de coyuntural en educación y se aboque a un trabajo que le permita contar con una nueva Ley General en la materia.
La directora general de FLACSO México, Gloría del Castillo, comentó que el objetivo principal de la actual Reforma fue recuperar la rectoría del Estado en educación.
Señaló que la política educativa de Estado nos obliga a establecer una de corte intersectorial necesaria para la solución de problemas públicos que trascienden lo educativo, como la pobreza y la desigualdad, que se enfoque en el bienestar de los hogares en condiciones de pobreza como estrategia central para la mejora educativa.
Roberto Rodríguez, académico del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, coincidió en que la pobreza que existe en México representa un gran obstáculo para otorgar educación de calidad a todos los mexicanos, en especial a las poblaciones más desprotegidas, entre las que se encuentran los indígenas y afrodescendientes.
Dijo que a pesar de que se ha avanzado bastante, todavía queda mucho por hacer en materia de cobertura y permanencia en la educación secundaria y media superior, que representan auténticos cuellos de botella. Aunado a ello, se requiere avanzar en los niveles de aprendizaje, finalizó.
El estudio puede consultarse en: www.inee.edu.mx