Aída GAXIOLA*
Ilustración: Ivanovich
El mundo está lleno de información y el bombardeo es constante. El hecho de cada vez haya más humanos dispersos, distraídos o bien en otros mundos no causa extrañeza hasta que esa distraída es una mamá que “mal atiende” a sus hijos por estar en otras cosas.
Entonces hagamos recuento de cuando por andar en todo, haciendo de todo, hiciste el ridículo de mamá:
1.- El día que metiste a bañar a tus hijos a las 7 de la mañana con agua fría (porque no te dio tiempo de prender el calentador) para ir a la escuela y era día de asueto.
2.- Cuando en la cola de la caja del super mandaste a uno de tus hijos por esa lata de chiles que olvidaste, terminaste de pagar saliste y dejaste a tu niño en la cola sin dinero con cara de “¿Qué voy a hacer?”.
3.- Cuando estás en las carreras de hacer la limpieza de la casa, la comida, la ropa y acomodar tu tiempo para tu trabajo. Y empiezas a hablarle a uno de tus hijos por todos los nombres menos el suyo. Solo para recibir de éste una cara de “¡O sea mamá! Primero muerto que ser mi hermano” y de paso chutarte el drama de “NO soy importante porque no me dices por mi nombre” (si supieran que para ti TODOS, son bestias, bonitas pero bestias)
4.- No recordar los nombres de los amiguitos de NINGUNO de los niños. O bien decirle por otro nombre a la novia porque ya no es esa y no se dignan a actualizarte la información.
5.- Que te tengan que decir por millonésima vez cuál es su personaje del juego porque para ti todos eso monos son igualitos, y el hecho de que brillen con distinto color para tus ojos no los hacen distintos.
Podría pasarme las páginas haciendo esta lista. Pero lo principal es que sí las mamás, o bueno YO como mamá soy distra…aída.
*Maestra Aída Gaxiola. Psicóloga Clínica, Madre, Yogui. Fascinada por las historias que florecen pero sobre todo de la maravilla del desarrollo humano. aidagaxiolav@hotmail.com
