Compartir

Alfredo MARTÍNEZ DE AGUILAR

  • El asesinato del sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada en Guerrero, se suma a las 60 víctimas desde 1990, incluido un cardenal, según reveló el Centro Católico Multimedial (CCM), en su Informe del 9 de diciembre de 2024.
  • El sexenio de Andrés Manuel López Obrador alcanzó el nivel de homicidios más alto en la historia moderna de México, sumando un total de 199.621 muertes por la política de “abrazos, no balazos” ante al crimen organizado y el narco.

Desde hace años, la Iglesia católica mexicana denuncia agresiones, amenazas y homicidios contra sacerdotes, especialmente en estados dominados por el crimen organizado y el narcotráfico.

El asesinato del sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada, párroco de San Cristóbal en Mezcala, Guerrero, encendió los focos rojos de alerta y alarma en la jerarquía y pueblo de la Iglesia católica.

El Centro Católico Multimedial (CCM), que registra la violencia contra miembros de la Iglesia en México, reportó que desde 1990 han sido asesinados 80 sacerdotes, religiosos y laicos en el país.

De ellos, 60 víctimas fueron sacerdotes, incluido un cardenal, precisó el Padre Omar Sotelo Aguilar, director del CCM, en el Informe del organismo difundido en México el 9 de diciembre de 2024.

Durante su intervención en rueda de prensa, dijo “como nunca en otro tiempo de la historia de México, la violencia ha alcanzado niveles preocupantes que azotan a todos los sectores sociales”.

El sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador 2018-2024 alcanzó el nivel de homicidios más alto en la historia moderna de México, sumando un total de 199.621 muertes.

El auge exponencial de la brutal violencia se produjo en el marco de la polémica política gubernamental de López Obrador “abrazos, no balazos” ante al crimen organizado y el narco.

El “vacío de poder y desmantelamiento del Estado de derecho”, dijo Sotelo Aguilar, obliga a agentes de pastoral, laicos, sacerdotes y ministros de otras iglesias a asumir “el papel que las autoridades han declinado”.

Con el asesinato del sacerdote Bertoldo Pantaleón, el crimen organizado y el narcotráfico pasaría de la extorsión con el cobro de derecho de piso en las parroquias a la ejecución de sacerdotes.

Sería un craso error de los narcopolíticos que hoy gobiernan México asesinar al sacerdote, de confirmarse que su chofer probablemente tiene vínculos con el crimen organizado y el narco.

Asesinar al sacerdote Bertoldo Pantaleón sería grave error de cálculo político de los narcopolíticos porque, según el censo 2020 del INEGI, 97 millones 864 mil 218 mexicanos son católicos.

Esos 97.8 millones de mexicanos que se adscriben como católicos, representan el 77.7% de la población total del país. Esta cifra hace de México el segundo país con más católicos en el mundo.

Además, las abuelas y madres de los narcopolíticos tienen confesores católicos, como lo hizo la madre de los Arellano Félix, Norma Alicia, con el Obispo de Tijuana, Juan Jesús Posadas Ocampo.

El lunes 6 de octubre, la Fiscalía del estado y la Diócesis Chilpancingo-Chilapa confirmaron la muerte del sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada, quien había sido reportado como desaparecido.

El sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada murió arriba de su camioneta y a manos de su chofer, informó Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México.

Harfuch dijo que colaboran con la Fiscalía de Guerrero para dar con el chofer del sacerdote, que desapareció el 4 de octubre. Agregó que todavía no tienen establecido un móvil del asesinato.

alfredo_daguilar@hotmail.com                                                                                      director@revista-mujeres.com                                                                                        @efektoaguila

Compartir