Claudia SAGREDO*
Hoy en día todos somos víctimas de la mercadotecnia y sus formas de incentivarnos a adquirir ese pulpo que refleja tu estado de ánimo para que tengas dulces gratis o hasta esa plataforma que detectará tus usos de consumo y te mostrará videos de perritos chistosos todo el día. Pues los museos, no se podían quedar atrás, recordemos que partimos de la primicia que la mayoría de los museos en el mundo viven de sus entradas y donaciones, por ello, a lo largo de los años han adoptado distintas técnicas de supervivencia en el mercado. Pregúntale a cualquier niño en esta actualidad: ¿quieres ir al cine o a un museo? Y dime qué te contestará; así que los museos dejaron de ser estos espacios de culto inalcanzable para enlistarse en las filas de la captación de públicos, de retención de los mismos y de prospectación de nuevos nichos de mercado.
Siendo así, tenemos un bazar de nuevas propuestas de marketing dentro y fuera de los museos, para referencia les quiero recalcar la de uno de mis museos favoritos en el mundo el Rijksmuseum. ¿Por qué es mi favorito si nunca lo he visitado? Porque sabe mantener mi interés y soy parte de su conteo de público de forma digital, es decir, consumo su contenido dentro de sus diversas plataformas de redes sociales: Instagram, youtube y tiktok. Este museo, tuvo la gran idea de sacar el museo a las calles, de permitirle a su público cautivo, que en este caso es su público local, recordar que no sólo era un recinto que resguarda joyas artísticas si no, que era divertido y que siempre podría ser un espacio de entretenimiento. Para ello, realizó un “flash mob” dentro de un centro comercial para promocionar a una de sus piezas icónicas de dentro de su colección: “La guardia nocturna” de Rembrandt, ¿te imaginas estar en la tienda de ropa interior y que a tu lado pase un soldado del siglo pasado?, ¿corriendo? Así que el para los museos las estrategias de promoción más que un artículo de moda son una necesidad primaria de supervivencia, más en estos tiempos de emergencia sanitaria, en donde, no sólo te enfrentas con el hecho de que “los museos no son tan divertidos como el gotcha”.
Para ello, siempre habrá prueba y error dentro de cada uno de los públicos y sus preferencias de consumo… ¿recuerdan la amada y odiada MET GALA? Hoy sólo retomaremos los casos de éxito de estas estrategias que nos remontan a otros productos que consumíamos desde nuestra infancia. En la ciudad de México, una empresa -privada- que se dedica a la promoción cultural creó el denominado “Pasaporte de museos” que funge al igual que un pasaporte para poder salir del país. Actualmente, esta focalizado a la Ciudad de México ofreciéndote más de 150 opciones de museos, así que podrías viajar alrededor de muchas corrientes artísticas del mundo. El extra de este pasaporte es que te ofrece descuentos en y promociones en algunos museos lo cual resulta atractivo si actualmente un acceso a un museo puede ir de los $50 a los $80 por persona. ¿Te imaginas a las familias de tu generación con 4-5 hijos pagando estos accesos para ir a un museo y que sus hijos le digan que se aburrieron? Así que aquí suman esfuerzos, una empresa de promoción cultural y el museo, ya que necesitas números para poder mantener obras y recintos.
Otra estrategia de mercadotecnia, que desafortunadamente se quedó en la concepción, fue creada en Lima, en donde un particular ideó un Monopoly de museos; ¿te imaginas visitar los museos más improtantes de tu país desde la comodidad de tu sala y en familia?. En este juego los tokens son Directora del museo, Jefa de Imagen, Curador y Programador cultural. Mientras que los hoteles rojos se reemplazan por colecciones y las casas verdes por piezas adquiridas. Las tarjetas de Arca Comunal y Fortuna están diseñadas para esta temática. Por ejemplo, recibes dinero en eventos como La Noche de los Museos, #MuseumWeek o el Día Internacional de los Museos; y entregas dinero cuando tienes que pagar un Abono Anual, eres Miembro del Patronato o adoptas una pieza del museo.
Así la concepción de este juego de mesa te permitiría conocer no sólo el museo sino, cómo opera el mismo.
Y para ti, ¿Qué estrategia de mercadotecnia ha sido tu favorita en los museos que visitas?
* Mercadóloga y gestora cultural enfocada en autogestión de recursos y relaciones públicas.