- CFE paga hasta ocho veces más de lo que se contrató y no le dan derecho de propiedad de los ductos.
- Se busca acuerdo justo con empresas privadas para evitar pérdidas para la CFE
Durante la conferencia matutina ante medios de comunicación, el Presidente Andrés Manuel López Obrador reafirmó que los contratos que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) realizó con empresas privadas a partir de la la Reforma Energética para la construcción de gasoductos para el transporte de gas natural a las diferentes centrales de generación de energía eléctrica, son leoninos y desastrosos.
Primero, porque se paga hasta ocho veces más de lo que se contrató; segundo, porque a la CFE no le dan derecho de tener propiedad de los ductos, y tercero, los contratos presentan cláusulas –por caso fortuito o fuerza mayor- que obligan a la CFE a pagar a las empresas privadas multas.
Por ello, el Presidente López Obrador indicó que se revisarán y se buscará un acuerdo justo y equilibrado para la CFE y las empresas privadas, sin que éstas salgan perjudicadas. Ya que adicional, el Consejo de Administración de la empresa no aprobó en su momento los contratos.
“Legalmente no queremos cancelar los contratos, nada más les puedo decir que tienen una falla de origen, no fueron aprobados estos contratos por los consejos de administración, no se aprobaron por el Consejo de Administración de la Comisión Federal de Electricidad”, puntualizó.
Además, las condiciones contractuales e institucionales adquiridas por la CFE con empresas privadas para la construcción de los ductos presentan una tasa de rédito por la inversión (equivalente a la tasa de retorno privada de los gasoductos) de 16.9%, siendo que la tasa regulada en México por el sistema nacional de ductos del Centro Nacional de Control del Gas Natural (CENAGAS) es de 10.6%, y en Estados Unidos y Canadá de 12% (Authorized Return on Equity for Canadian and Us Gas and Electric Utilities).
Aunado a que las empresas IEnova, Carso, TransCanada y Fermaca concentran más del 90 por ciento de los contratos, y la construcción de algunos ductos a su cargo se encuentra detenida por caso fortuito o de fuerza mayor.
De esta manera, la CFE y el Gobierno federal se comprometen a revisar cada uno de los contratos leoninos de gasoductos licitados con privados, cuyas cláusulas se traducen en pérdidas financieras permanentes al patrimonio de la empresa.
