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Ana Syl HERNÁNDEZ CORRES*

Desde hace tiempo he comprendido la importancia de celebrar mi cumpleaños y el cumpleaños de las personas que conozco y estimo y es que no esta por demás decir que este día aparte de ser trascendental porque hemos llegado a este plano, nos indica el día en que un ciclo se cierra y otro comienza.

Ha llamado mi atención en los últimos años que algunos conocidos y amigos no celebran su cumpleaños, las causas que refieren son: porque en su casa nunca lo celebraron, porque los cumpleaños traen malos recuerdos o simplemente porque no le encuentran el motivo para celebrarlo. Es posible que algunas personas puedan sentir ansiedad, miedo o angustia porque cumplen un año más y no han logrado las expectativas que tenían para cuando llegaran a esa edad o porque tienen miedo a la vejez, algunos incluso ocultan su fecha de nacimiento para no ser felicitados.

Es necesario respetar la decisión de cada uno, sin embargo, no tiene que ser una celebración externa, pero si podría ser una celebración personal, en donde cada uno reflexione sobre su vida, sus metas, sus logros, sus cuidados, sus necesidades y su valía en este mundo.

Celebrar el cumpleaños de alguien es celebrar su vida, reconocer los méritos, las metas, los retos que ha superado y lo más importante felicitarlo por su existencia, por lo importante que es. No tiene que ser una gran fiesta o una gran celebración costosa, con el simple hecho de recordar la fecha y expresarles la felicidad que nos da de que haya cumplido un año más es suficiente, los regalos, los pasteles y las fiestas pueden ser un plus que podemos brindarle.

Es por esto que celebrar los cumpleaños de las y los infantes tiene una gran importancia, celebrarlos cada año les hace saber que son un año más grandes que sepan que están creciendo y desarrollándose, lo cual es un motivo suficientemente importante para estar felices.  Las fiestas o cualquier tipo de celebración aumentan su autoestima ya que son los protagonistas del momento y reciben todo el cariño de las personas que le rodean que generalmente son familiares y amigos. Según la doctora Jacqueline Woolley (2017) los beneficios de celebrar los cumpleaños en la infancia son los siguientes:

  • Elevan su autoestima; se siente querido y significativo.
  • Refuerza los lazos familiares; no importa el tamaño de la celebración, lo importante es el sentido de la reunión.
  • Establecen relaciones sociales; ayuda al niño o niña a relacionarse mejor a través de sentimientos de compañerismo y bondad.
  • Crean memorias positivas.
  • Les ayuda a tener una percepción del tiempo; los hace conscientes de su crecimiento.

Celebrar los cumpleaños cuando somos adultos nos da una sensación de alegría, positivismo, la posibilidad de plantearnos nuevas metas, nuevos objetivos, rodearnos de las personas que nos quieren y sobre todo celebrar la fortuna de seguir vivos después de todo lo que hemos pasado en este contexto de contingencia y eventos sociales y naturales.  Cuando cumplas años, puedes pedir tu comida favorita, descansar más de lo habitual, viajar, estar con las personas que mas quieres, hacer lo que te gusta y recordarte lo maravillosa o maravilloso que eres. Y recuerda que no importa el tamaño o lo ostentosa que sea la celebración, lo importante es el significado que tiene.

Si eres de las personas que no les gusta celebrar su cumpleaños, detente un momento y reflexiona ¿por qué no te gusta? Es algo que aprendiste o es por alguna otra causa que te provoca sensaciones desagradables o incluso es doloroso, de ser así y de querer resolver esto, acude con un profesional de la salud mental que pueda guiarte en esta situación.

 

 

*Psicoterapeuta Humanista Ana Sly Hernández Corres. Corporativo Ramírez Luna

IG / FB: RamírezLunaCorporativo / www.ramirezluna.com.mx

 

 

 

 

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