Recientemente se logró establecer que un elevado porcentaje de las 20 mil pantallas digitales que distribuyó el gobierno federal entre las familias de la Cuenca del Papaloapan que gozan de programas sociales, resultaron un fraude colectivo, ya que en la zona rural no se llega a captar la señal de transmisión.
”En algunos casos logramos captar señal pero sólo de dos canales y nomás de Televisa”, sostuvo visiblemente molesta la señora Guillermina Palacios Roque, de la comunidad de Reforma, perteneciente  al municipio de Tuxtepec; una de las miles de beneficiarias del programa federal que terminó sin televisión con el apagón analógico.
”Fui a ver a uno de mis sobrinos que medio le entiende a esto, me conectó el aparato y no detectó ni un canal según porque ahora resulta que hay que comprar una antena  para captar la señal. Fui a preguntar  y cuesta 320 pesos, cantidad que no tengo”, agregó  la quejosa quien ya no puede ver sus programas favoritos.
Para corroborar su dicho, la señora Guillermina Palacios permitió entrar a su humilde hogar para corroborar su queja y en efecto, su nueva pantalla digital estaba “muerta”, solo aparecía una leyenda que no se había detectado ningún canal. “Esto es un fraude, no tengo dinero y ahora debo comprar la antena”, señaló.
Otro caso es el del señor José  Fuentes Quintana de la comunidad de Agua Fría, Tuxtepec, quien afirmó que “las pantallas digitales no es más que la venta de ideas”, pues por lo pronto se ha logrado captar la señal de dos canales de televisión abierta, “casualmente de Televisa”.
“Jamás se pudo localizar otros canales y menos de Televisión Azteca, lo cual resulta privativo para las familias de escasos recursos, pues con esto, el gobierno y las grandes empresas de la comunicación están prácticamente obligando a contratar la televisión de paga”, expuso Fuentes Quintana.
Las quejas se reflejaron en el comité regional campesino de la CNC, en donde su representante, Filogonio Santos Gómez, indicó que un elevado número de sus representados se quejaron sobre el disfuncional método de las pantallas digitales que mandó el gobierno para contrarrestar el apagón analógico.

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