A reforestar a Oaxaca, pero en serio y en todos los sentidos
Pedro Martínez Lara
La Presidenta Claudia Sheinbaum fue a la cumbre del G20 a proponer el programa “Sembrando Vida”, el cual fue puesto en marcha por AMLO durante el sexenio anterior y ella le seguirá dando aplicación durante el presente; en su intervención ante importantes jefes de Estado y de Gobierno reunidos en Río de Janeiro, Brasil, en la primera sesión de esa cumbre denominada “Lucha contra el hambre y la pobreza” expresó la importante consigna: “dejar de sembrar guerras, sembremos paz y vida” pidiéndole al mundo entero luchar unidos por frenar el calentamiento global y restaurar el tejido social, ayudando a las comunidades a salir de la pobreza y mencionando que “es absurdo, sinsentido, que haya más gasto en armas que para atender la pobreza o el cambio climático, así como para reducir la migración y el hambre”.
En consonancia con los planteamientos hechos por la Presidenta de la República y que fueron aceptados por quienes asistieron a esa cumbre mundial, en nuestro país y específicamente en nuestro estado de Oaxaca, quienes nos gobiernan deben responder con verdadero compromiso al llamado que hizo la Doctora Sheinbaum al mundo, representado por los miembros del G20, y “ponerse las pilas” para hacer programas de reforestación que no sean solo de relumbrón y en áreas visibles de las ciudades; sino hacerlo con verdadero empeño en las regiones de la Mixteca, la Mixe Alta, la Cañada, el Istmo y los Valles Centrales, por mencionar las más deforestadas y en donde la erosión de los suelos es mayormente crítica.
La puesta en marcha de programas de reforestación inmediatos y eficaces en las áreas del Crestón, de San Felipe “del Agua”, del Fortín y Montealbán, más bien le corresponderían a la autoridad municipal “verde” que está por asumir el mandato en esta demarcación, ojalá que el nuevo Edil muestre que realmente él si tiene conciencia ambientalista y atienda la deforestación de la “Verde Antequera” brindando, además, la atención necesaria a los graves problemas del agua y de la basura. Estaremos atentos de su actuación, pero también ahora hay que agregar el grave problema de la inseguridad que padecemos las y los oaxaqueños.
El gobernador de la llamada “Primavera Oaxaqueña” deberá triplicar su capacidad de gestión ante la federación para estar en condiciones de asumir el compromiso de llevar a la práctica los lineamientos sobre el cuidado de la naturaleza y otros muy prioritarios que enarbola nuestra Presidenta, pues actualmente se tienen varios desafíos en Oaxaca a los cuales “ni siquiera se les han hecho cosquillas”, por lo mismo, la ciudadanía estará pendiente al cumplimiento de las metas incluidas en el Plan Estatal de Desarrollo de este sexenio en los rubros más sentidos por la sociedad oaxaqueña.
Se han anunciado cambios en el gabinete estatal a la mitad del “Sexenio Primaveral”, pero estos deben ser realizados a conciencia y no solo operar enroques maltrechos, que nada van a resolver en los renglones en donde tenemos mayores retos; habría que analizar si los cuadros que están actualmente han funcionado realmente o simplemente han permanecido como objetos decorativos. Muy pronto sabremos si la Primavera”retoña” o bien, seguirá su lamentable proceso de deterioro.
Usted tiene la palabra, señor Gobernador Salomón Jara Cruz. PADIUSH.