¿ES LA GEOGRAFIA EL DESTINO?
Mtro. José María Villalobos Rodríguez
TELEMADRID produce una serie de reportajes sobre regiones y ciudades del mundo en la que el reportero se encuentra con madrileños que radican en el extranjero. Cuentan cómo llegaron ahí, cómo les va, qué es lo que estudiaron, cuánto ganan, cuánto pagan de renta, cuántos hijos tienen, si tienen o no pareja, qué tan caro resulta la compra de alimentos, la luz o la calefacción. Al final, expresan si les gustaría o no volver a Madrid y por qué. Es común que emigraron por falta de empleo, por una mejora profesional o por un amor.
Predominan ingenieros, entrenadores deportivos, médicos, informáticos, gestores de hoteles, investigadores, nanas y cocineros. Lo valioso que encuentro en “MADRILEÑOS POR EL MUNDO” es la forma en que estas personas se adaptan con éxito a un entorno diferente. Señalan ellos las diferencias del trato que tiene la gente de Escandinavia con la de Brasil o México. Lo hacen con tino y ejemplifican las estrategias para integrarse rápido a cada lugar.
Muchos de ellos han formado familia con extranjeros y comentan los diferentes apoyos gubernamentales a quienes tienen hijos, cómo se les va educando y cuál es su perspectiva al futuro cercano. Las regiones más prósperas y con mejores salarios suelen ser las dedicadas a la extracción de gas y petróleo como Noruega, Arabia Saudita o el Norte de Escocia. El principado de Brunei – cercano a Singapur es de tal opulencia que nadie paga impuestos, pero como es musulmán tiene que apegarse a sus estrictas prohibiciones sobre el consumo de alcohol o el recato obligatorio para las mujeres.
En Birmania – nación budista por Ley – resalta el rezago en calidad de vida que les dejó una prolongada dictadura ultra abusiva; en Moldavia los restos humeantes de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas y las prácticas del más ortodoxo de los cristianismos.
Este programa cubre muy bien la cultura, gastronomía y los gustos de la gente destacando el detalle del origen de los diferentes guisos o en el caso de Asia porqué se comen escorpiones, caninos o monos. Siempre con respeto y buen humor sus reporteros viven tal como lo hacen los lugareños de los sitios que sus programas describen. Incluso, practican los juegos o bailes populares por lo que igual se meten a bañar en aguas gélidas que escalan rocas en montañas con el objeto de sentir la emoción de lo local.
En las ciudades europeas avanzadas muestran cómo la bicicleta gana cada vez más popularidad desplazando otras formas de transporte. En sus desplazamientos con frecuencia recorren territorio o una zona urbana en las que coexisten los cascos fundacionales de las ciudades con los suburbios modernos de reciente construcción. Ciudades como Salzburgo en Austria o Florencia en Italia son mostradas con antecedentes sólidos su origen, personajes ilustres que ahí nacieron o en cuyos panteones o templos reposan los restos mortales de sus hijos ilustres.
También acceden a los centros escolares – desde pre primaria hasta post doctorado y vemos cómo la educación es tratada de muy diferente manera. En países avanzados del centro norte de Europa se investiga en un ambiente multi cultural que cuenta con todo tipo de apoyo público o de la filantropía privada. Investigan la genómica, el cáncer o enfermedades derivadas de la contaminación o el stress de la vida urbana.
Se tiene libertad de investigar en un ambiente propicio para lograr los resultados deseados tales como vacunas, cura o prevención ante nuevas epidemias. En el Reino Unido se tiene excepcional interés científico sobre los hábitos de las aves. Se paga el postgrado al investigador que verifica si la especie está o no reproduciéndose para asegurarse de que se evite la extinción.
En el caso de Tailandia TELEMADRID se maravilla de lo que tiene en recursos naturales, pero lamenta el caos de la vida en las ciudades o en los márgenes de ríos muy contaminados. Es una cobertura ágil, bajo un formato fijo que busca ejemplificar los usos y costumbres de las ciudades de los cinco continentes.
Tiene un enfoque claramente favorable al cuidado del medio ambiente y de crear conciencia de la fragilidad del hábitat que heredamos de nuestros abuelos y entregaremos a nuestros nietos. Es de hacer notar cómo los españoles explican que salir al extranjero en busca de un mejor empleo o un mayor ingreso les vino a abrir los ojos de nuevas oportunidades de vida. México como país no es precisamente muy amistoso con quienes se tienen que venir acá a trabajar o a vivir.
En los últimos 50 años tuvimos emigrantes provenientes de Cuba, Chile, Argentina, Uruguay y Centro América – la mayoría ante la inestabilidad social de sus países de origen. Se tiene una percepción negativa hacia el desconocido y este lo nota y se aparta. Al interior del país se nota más el rechazo al foráneo.
Cuando el mexicano se va para el “Norte” suele sufrir en carne propia la discriminación y el rechazo y, sin embargo, tiene la misma costumbre en su localidad. Existe desconfianza y lo menos que hace es ningunear al susodicho.
“Ningunear” es un ejemplo de mexicanismo que expresa hacer menos al otro, no darle importancia alguna. Y es que en muchos casos el mexicano es sumamente racista contra quienes nacieron fuera y por estricta necesidad viven con nosotros.
En el sur y la Península de Yucatán tenemos altercados frecuentes contra los “gueritos” ignorando que muchos de ellos son tan o más mexicanos que los locales. Es muy recordado el México del fin del Porfiriato en el que el Gobierno Federal y sus tropas empezaron a agredir y exterminar a miles de personas de origen chino en la zona de Torreón, Coahuila. Paco Ignacio Taibo tiene una novela histórica muy bien documentado cómo se hizo toda una campaña de odio contra los trabajadores chinos de los FERROCARRILES mexicanos.
Es en estos momentos la oportunidad de hacer un esfuerzo de mejora en qué áreas educativos o técnicas podemos aprovechar la experiencia de otros países para nuestros jóvenes.
En las naciones avanzadas en la Unión Europea se promueve y se espera mucho de estudiantes con buenas calificaciones. Si es extranjero y se va a visitar Arles en Francia podrá ver con sus ojos los colores intensos que inspiraron a Van Gogh para hacer sus lienzos. Pero si, además, conoce cómo vivía y cómo fue su muerte en la inopia valorará más la creatividad en un contexto de adversidad. Algo que en México nos está faltando.
Nuestro entorno lleno de inseguridad nos costará la emigración de mucho profesional talentoso que progresará a costa de dejar sus orígenes. Espero que no sea demasiado tarde y no tengamos que hablar de una generación perdida.